Podremos hablar mejor cual cercano tótem
pero la perfección entorpecerá el camino
La esperanza continuará
multiplicándose entre llantos
y no sabrán cuando
el camino ladre su amor a la luna
Olvidaremos
la historia humana que condena
la muerte porque no hay otra
Palparemos
un instinto de divina humanidad
en el sangrar
asombroso del sol
Habrá una tarde tan incrustada
en el invierno prematuro
que sacará su luz
Luego las manos
sabrán
decir sus palabras
pero hay
de los ojos que hablen
de modo eterno como diosas.
pedro madre